Creo que a todos nos encanta ver paisajes hermosos, nos emocionamos cuando sabemos que veremos a alguien que hacía mucho no visitábamos; pero tan solo podemos imaginar ver la gloria de Dios, ¿te gustaría verla? En realidad a continuación la Escritura lo pone muy sencillo.
Jesús respondió: —¿No te dije que si crees, verás la gloria de Dios? Juan 11:40 (NTV)
Tan solo hace falta creer. Y es que cuando creemos firmemente, de corazón, podemos ver a Dios en todo. Podemos ver Su maravillosa creación y apreciar la obra de Su genial e infinito poder y amor por nosotros.
Todos queremos ver lo bueno, lo noble, lo generoso en todos. Sin embargo, a diario, en las noticias, nos informamos de todo lo que ocurre en el mundo y a veces no queremos ni ver la televisión para no enterarnos para no llorar de dolor con todo lo que está ocurriendo.
Lo que no queremos ver es todo lo que está pasando
Es un hecho que el mundo está viendo las consecuencias de la corrupción, del deseo de poder, de querer más territorio. La división que vemos en todas partes, en las familias, en los hogares, los matrimonios que se disuelven. Pero no olvidemos creer en las promesas de Dios.
El Señor nunca dijo que sería fácil o que no tendríamos problemas si creíamos en Él. Pero confiamos, tenemos fe en la promesa de la eternidad en un lugar perfecto, sin lágrimas ni enfermedades, sin dolor ni guerras. Un mundo como el que Él quiso que fuera este planeta donde vivimos.
Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos. Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más». Apocalipsis 21:3-4 (NTV)
Cuando te sientas abatido, decepcionado, sin ganas de seguir adelante, recuerda cuánto te ama Dios y que esta vida aquí, es temporal. El tiempo que cuenta, el eterno, el que será para siempre, si lo escogemos a Él, si creemos en Jesús, en su vida, su ministerio en la Tierra, en su muerte como paga por nuestros pecados y en su resurrección, podremos vivir la eternidad en ese Paraíso.
Ten siempre presente que si creemos en Él veremos la gloria de Dios.
Oración del día
Dios de mi vida, bendito Señor, gracias por tanto amor y por saber que esta vida es temporal. Gracias por tu promesa de eternidad a Tu lado si creemos en ti. Te pido que me ayudes a sobrellevar las cargas, que me ayudes a sacudir el abatimiento que me abraza a veces.
Que tenga yo siempre presente cuánto me amas y que me prometiste la eternidad a Tu lado en un lugar perfecto. En el nombre de Jesús, amén.
Aplicación
¿Qué es lo que te llega a abatir en estos tiempos?