Cuando queremos servir a Dios y estar en una buena relación con Él, encontramos alegría en Sus mandatos. Sabemos que lejos de prohibirnos cosas, lejos de castigarnos por no cumplirlos, son consejos que nos dio para nuestro beneficio.
Cuando la presión y el estrés se me vienen encima, yo encuentro alegría en tus mandatos.
Salmos 119:143 (NTV)
Libres de condenación
Hay quienes temen el juicio de Dios. Y si bien es cierto que se habla del juicio en la Biblia, quienes creemos en Jesús sabemos que en ese juicio, se presenta Él por nosotros. Viene a ser como nuestro abogado ante Dios.
En ese caso, Dios no nos ve a nosotros, sino a Su Hijo y por ello tenemos garantizada la eternidad a Su lado por Su gracia sin igual; porque ya no hay condenación para nosotros, nos limpió de nuestros pecados y nos perdona cuando nos arrepentimos.
Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús;
Romanos 8:1 (NTV)
Cuando ofreció Su vida por todos, los que creemos en Jesús seremos justificados por Él. Si no creyéramos en Su muerte y resurrección, nada tendría sentido. La razón de venir a estar con nosotros, Emmanuel, Dios con nosotros, fue anular nuestros tendencia constante al pecado.
Él anuló el acta con los cargos que había contra nosotros y la eliminó clavándola en la cruz.
Colosenses 2:14 (NTV)
Jesús nos da la alegría de hacernos justos ante Dios Padre
Cuando venció la muerte, por fe, creyendo en los testimonios de quienes le vieron resucitado y sintiendo que sigue vivo, somos justificados. Necesitamos hacer crecer nuestra fe a diario, nutriendo nuestra relación con Jesús. Haciéndolo prioridad.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Efesios 2:8-9 (RVR 1960)
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.