La Certeza del gozo que tendría fue lo que permitió que Jesús soportara la cruz. Estar seguro de lo que vendría después y de cuál era su propósito, opacaron sus circunstancias. ¡Y nosotros podemos sentirnos de la misma manera cuando ejercemos la fe!
Jesús sabía que estaría a la derecha de Dios porque había sido obediente a la voluntad de Su Padre.
Ese gozo es producto de estar conscientes de la verdad por fe. Jesús nos invita a tener una relación con Él, a escucharlo y descubrir Su verdad, a creer en esa verdad y vivir con Él en nosotros.
¿Cómo experimentar el gozo?
Esa certeza del gozo de Jesús debe ser un ejemplo a seguir para nosotros y sólo la tendremos fijando nuestros ojos en Él, siguiendo Su ejemplo. Entonces, podremos experimentar ese gozo, esa alegría que trasciende la emoción de las circunstancias y no es que no sintamos nada. Jesús sintió mucho dolor, físico y espiritual al estar en la cruz, pero eso no le quitó el enfoque de lo que estaba por venir.
Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien, por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.
Hebreos 12:2 NVI
¡Mira más allá de las circunstancias y experimenta el gozo del Señor!
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.