Estamos viviendo un tiempo diferente: ahora las personas deben trabajar desde casa. Un momento histórico que, seguramente, redefinirá el mundo como lo conocemos. Muchas cosas cambiaron y seguirán cambiando, y una de ellas es el trabajo flexible y el balance entre vida y trabajo. Hoy, el aislamiento obliga a muchas personas a permanecer en sus hogares y redefinir un nuevo marco de trabajo.
¿Cómo afecta esto a nivel psicológico? ¿Qué consecuencias conlleva? ¿Como configuro mi mente para adaptarme a esta nueva modalidad? Son todas preguntas que han surgido en estas últimas semanas en nuestros consultorios de Centro Terapéutico Integral (@cti.psicologia).
Home office: ¿una alternativa?
El término home office (teletrabajo), se remonta siglos atrás, ya los artesanos trabajaban donde vivían, tanto en la antigua Roma como en la época Medieval. Si bien, el término es antiguo, hoy está más en foco y en boca de todos. El confinamiento ha obligado a la mayoría de las personas, que solían ir a sus oficinas o puestos de trabajo fuera del hogar, a reclutarse en sus casas y reorganizar sus tareas.
Uno de los errores frecuentes que suele ocurrir (y más en personas que vienen practicando esta modalidad desde tiempo atrás) es el no saber poner fin a la jornada laborar. Las personas siguen teletrabajando durante más horas de las debidas, esto puede acarrear consecuencias físicas y psicológicas como el llamado síndrome de burnout, es el síndrome de desgaste profesional, (también conocido como el ≪trabajador quemado≫); son las personas que no pueden manejar de manera adecuada el estrés que les generan las tareas o responsabilidades propias del trabajo, generando síntomas físicos como agotamiento, insomnio, dolores de cabeza frecuentes, bajo rendimiento, irritabilidad, impaciencia, entre otros.
Esta nueva modalidad de trabajar desde casa tiene sus consecuencias negativas y también tiene su lado positivo; siempre y cuando tengamos en cuenta lo que ya anticipamos para evitar el estrés que esto pueda generar. Por eso es necesario que sigas las siguientes reglas para poder sacar provecho de esta situación que, en muchas personas, les ha venido de golpe y han tenido que tratar de adaptarse lo más rápido posible.
Herramientas útiles que te ayudarán
Estas son algunas cosas que puedes hacer para capitalizar este tiempo de home office de la mejor manera y con el menor impacto posible.
1. Delimita un espacio específico en la casa exclusivamente para trabajar
No cambies de lugar día a día. Habla con los integrantes de tu familia para que te apoyen en esta nueva reorganización de espacios y generar un lugar de trabajo donde puedas ir a trabajar.
Si bien muchas casas no cuentan con un espacio personal para teletrabajar, se pueden crear lugares para este fin; lo importante es desatar la creatividad y la flexibilidad para adaptarnos a esto.
2. Pon inicio y fin a la jornada laboral
El establecer una rutina diaria te ayudará a no caer en el estrés que generan las preocupaciones diarias. Si antes te retirabas de tu oficina a determinada hora, hoy y desde tu casa, deberías actuar de manera similar. Terminada la jornada laboral en tiempo, permítete tiempo libre para estar con los demás o para conectarte con amigos.
3. Armar una hoja de ruta
La hoja de ruta te llevara a donde quieras ir. Es necesario cerrar el día laboral y planificar las tareas para el día siguiente. Esto te ayudara a organizarte en tus tareas y optimizar tu tiempo.
4. Disminuir expectativas y tener escenarios posibles
Cada familia es especial y tiene sus rutinas diarias. No busques compararte con las rutinas ajenas porque cada familia funciona de una manera singular y es muy probable que las rutinas que observes en otros no puedan adaptarse a tu realidad.
Si bien el trabajar desde casa es un desafío ya en tiempos normales, en momentos de crisis se generan grandes cambios e incertidumbres.
¡Pero todo se logra con entusiasmo y actitud!
Si quieres aprender más sobre cómo nos afecta trabajar desde casa, mira la entrevista:
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.