La infancia es una etapa importante de la vida que impacto tanto positiva como negativamente; pero no siempre estamos al tanto de la influencia que tiene. Muchas personas desarrollan hábitos y formas de pensar, sin reconocer que su crianza y niñez afectó en la clase de personas que son en el presente.
En la actualidad, los terapeutas y consejeros buscan que la persona primero resuelva las cosas de su pasado, y así pueda sanar sus heridas.
Para ayudarte en este proceso, la psicoterapeuta licenciada y especialista en recuperación de traumas relacionales, Annie Wright, afirma que las siguientes señales te dirán si tu niñez tiene un efecto perjudicial en ti.
Si tu infancia afectó negativamente tu vida…
Tu estado de ánimo cambia con facilidad
Una señal inequívoca de una niñez difícil que influye en el presente es que las emociones están en descontrol. Toda persona puede sentir un amplio rango de sentimientos que cambian de acuerdo a las situaciones; pero una persona que es dueña de sí misma, puede manejarlos con tranquilidad. Según Wright, estos son algunos ejemplos:
Cuando te perciben bien y te tratan bien, tu estima se dispara. Cuando te tratan o te perciben mal, tu confianza se desploma. […] Te sientes ansioso y te preguntas qué hiciste, tu noche se arruinó mientras reflexionabas.
Si quieres ser emocionalmente maduro, es vital que aprendas a regular tus emociones y no saques conclusiones apresuradas en base a una información parcial.
Tienes poca autoestima
Una cosa es tener inseguridades, las cuales todos tenemos en una u otra área; pero una persona que no se ama a sí misma puede ser el resultado de los malos recuerdos de la infancia.
Wright dice que las personas cuya niñez fue difícil suelen moverse por el mundo enmascarando su falta de autoestima; y no solo eso, además sienten que están fingiendo y que serán descubiertos:
La baja autoestima, la autopercepción deteriorada y sentir que te mueves por el mundo fingiendo todo y simplemente no estás preparado para lo que la vida requiere puede ser otro sello distintivo de que tu pasado te impactó negativamente.
La infancia es una etapa en donde se define nuestra personalidad, carácter y percepción interna y del mundo; y es por ello que influye en la construcción de una autoestima saludable.
Tienes problemas en tus relaciones interpersonales
Wright afirma que una persona marcada por su pasado puede tener muchas relaciones interpersonales en su vida, pero lamentablemente, no son saludables. Ella sostiene que «no es raro que aquellos que crecen en hogares disfuncionales, caóticos, negligentes o abiertamente abusivos enfrenten desafíos para buscar y mantener relaciones sanas y funcionales».
Si has pasado por varias rupturas amorosas, tienes problemas con tus compañeros de trabajo o incluso con tus amigos y familiares, considera que tal vez hay algo en tu pasado que debes enfrentar y sanar apropiadamente.
Sientes que tienes que escapar
Wright dice que si sueles escapar del aburrimiento, el estrés, a tensión y el dolor emocional de tu vida diaria a través de acciones o sustancias repetitivas, a veces de manera compulsiva, entonces es porque estás marcado por tu infancia.
Ella dice que una infancia que influye negativamente en la vida de alguien le lleva a tener la necesidad de escapar: «La vida se siente como demasiado y, para cuidarse a sí mismo, desarrolló formas de sobrellevar la situación», y esa forma es escapando.
¿Identificas algunas de esta señales en tu vida? Entonces te animamos a hacer las paces con tu pasado y comenzar una vida nueva. Si no sabes cómo hacer, escríbenos a Contacto.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.