En la Biblia se habla de dos clases de entendimiento, con los que debemos hacer un balance para poder entender la Palabra de Dios. Uno es una especie de entender espiritual del que se habla en Proverbios 4:7 (RVR60) “Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia”. El otro sería el entendimiento basado en la sabiduría del mundo:
Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia.
Proverbios 3:5 (NVI)
Es nuestra lucha constante
La lucha más fuerte para los cristianos es estar en esa tensión que dan los dos tipos de entendimiento. Es como que nos preguntamos: ¿cómo vivir en la realidad con el conocimiento que adquirimos si en ocasiones se opone a lo que creemos? ¿Cómo ser valiente con el Evangelio si hay cosas que no las comprendemos del todo? ¿Puedo llegar a entender la Palabra de Dios?
Una solución para entender la Palabra de Dios
La solución sería estrechar nuestros lazos con Dios en fe. Siempre buscando ser sabios. Dios nos dijo que a quien le pidiera sabiduría Él se la daba. Hay que pedirla con humildad. Estar conscientes de que no todo lo tenemos que entender.
Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los míos —afirma el Señor—.Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra!
Isaías 55:8-9
Por eso se nos hace complejo el entendimiento de la Palabra de Dios.
No olvidar buscar la ayuda precisa
Debemos confiar en Su Espíritu Santo para guiarnos y darnos mayor conocimiento. Antes de dedicarnos a estudiar la Biblia, oremos y pidamos Su ayuda. Tratemos de entender el mensaje y no de buscar qué nos parece raro o contradictorio, como hacen muchos. Cuando nos dejamos guiar por el Espíritu, podremos tener un mejor entendimiento de la Palabra de Dios.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.