Muchas veces decimos confiar en Dios, pero cuando nos hallamos en diversas pruebas nuestras actitudes demuestran lo contrario; al parecer, tenemos fe en tantas cosas, pero nos cuesta hacer lo mismo con nuestro Padre celestial.
Sin importar la situación en la que te encuentres hoy, quiero recordarte que Dios es más poderoso que todo problema, Él nunca ha perdido una batalla y siempre ha tenido cuidado de los suyos. Y el Salmo 91 lo confirma, cuando comienza diciendo:
El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.
Salmo 91:1 (RVR 1960)
Si por fe escoges a Dios como tu protector, encontrarás en Él todo lo que necesites, porque hasta en el último pasaje de este Salmo el autor escribe detalladamente cómo Él nos guarda de todo peligro que nos asedia.
Ya no te encierres en tus problemas, basta de romperse la cabeza buscando cómo solucionar esto o aquello, deja de preocuparte y descansa en Dios, porque Él es capaz de hacer lo que para nosotros es imposible.
Confía en Dios y tendrás la plena seguridad de que pase lo que pase Él te cuidará y protegerá de toda maldición y peste que quiera destruirte.
No te atormentes con las malas noticias que puedas escuchar, aprende a confiar en Dios y mira más allá de lo que tus ojos humanos puedan ver.
Proverbios 3:5-6 dice: Confía en el Señor de todo corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas.”
Los que confían en su propia justicia y poder piensan que pueden solucionar sus problemas sin la intervención de Dios; por el contrario, los que confían en Dios, son testigos de sus grandes bendiciones.
Ya no te preocupes más, Dios está de tu lado para ayudarte y protegerte, aprende a confiar en Él.
Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré.
Salmo 91:2 (RVR 1960)
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.