¿Cómo tener buena salud mental y emocional? La salud mental al igual que la emocional son claves para lograr cumplir el propósito de Dios en nuestra vida. Es imposible proyectarte al futuro o vivir a plenitud el presente si no estás bien internamente.
La buena noticia es que la Palabra de Dios está llena de referencias que te pueden dirigir hacia el camino correcto para lograr el bienestar emocional. En algunos casos será necesario buscar ayuda profesional que te apoye en el proceso de sanidad, y está bien. Acompaña el proceso descansando en Dios.
Solo en Dios halla descanso mi alma; de el viene mi salvación.
Salmos 62:1 (NVI)
Para tener buena salud mental y emocional
Admite cuando necesitas ayuda
¿Cómo lograr esa sanidad? Primero, debes admitir cuando necesitas ayuda. Darte cuenta que en algunos casos no tienes todo bajo control, está bien, siempre y cuando te lleve a buscar ayuda. Si el enemigo logra aislarte con un problema que te agobia y hacerte guardar secretos que te roban tu salud mental, te estará condenando a vivir una vida a medias.
Si no nos abrimos a una forma de procesar nuestras desilusiones, nos veremos tentadas a dejar que Satanás reescriba la historia de amor de Dios como una narrativa negativa, dejándonos con más sospechas acerca de nuestro Creador.
Lisa Terkeurst
Descansa
Un alma saludable esta descansada; no está emocionalmente angustiada. No se preocupa ni se vuelve ansiosa, temerosa o asustadiza. No está cargada con culpa o vergüenza. Ha encontrado su hogar en Dios y confía en que Él cuida de todo lo que le preocupa.
Joyce Meyer
Aprende a descansar en Dios, soltando tu ansiedad y preocupación. Él tiene cuidado de ti. Mientras más absorbes esta gran verdad, más podrá tu mente descansar.
Perdona
Hay personas a quienes se les escucha decir: «Yo perdono, pero no olvido». Por ser tan sinceras reciben grandes críticas. Sin embargo, científicamente hablando su argumento es totalmente correcto. Todo cuanto nos acontece queda registrado en nuestra memoria. El olvido no existe. Es imposible borrar lo que nos han hecho, lo que nosotros hemos hecho a otros, o lo que nos hemos hecho a nosotros mismos. Si perdonar no es sinónimo de olvidar, ¿qué es entonces el perdón? El perdón es conseguir que cuando el evento llegue a nuestra memoria ya no duela. Según va pasando el tiempo el suceso nos va doliendo menos. El dolor es el medidor que nos indica por donde vamos en el proceso. La palabra perdón es una palabra compuesta de «per» y «don». Un «don» es un regalo y el prefijo «per» es un superlativo, es decir que el PERDÓN es un regalo grande.
Dra. Lis Milland
Todos cometemos errores. Existen personas que te han herido incluso que te han marcado, pero tú escoges si de esas cicatrices aprenderás o dejarás que te amarren al pasado. Puedes otorgar el perdón, igual que se te perdonó a ti.
Perdónanos el mal que hacemos, como también nosotros perdonamos a quienes nos hacen mal.
Mateo 6:12 (BLP)
Conecta
Cuando te sientes más conectado y feliz, puedes apoyar, observar y escuchar a los demás. Esto no solo les ayudará a ellos sino también a ti; las personas que ayudan a otros pueden experimentar hasta un 68 % de aumento en su propia sanidad.
Dra. Caroline Leaf
Nuestro Creador nos hizo seres relacionales. Buscar e integrarte a una comunidad o compartir tiempo en familia le aportarán a tu vida salud y bienestar.
Sin embargo, si sientes que nada de lo hemos compartido te ha ayudado en para obtener sanidad mental y emocional, no dudes en contactar un profesional de la salud. Recuerda que la Biblia también dice que:
Cuando falta dirección, el pueblo caerá; pero en los muchos consejeros está la victoria.
Proverbios 11:14 (RVR2015)
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ. El presente se escribió en su totalidad por un ser humano, sin uso de ChatGPT o alguna otra herramienta de inteligencia artificial.