Salir de tu zona de confort te ayuda a conocer quién eres en realidad y lo que eres capaz de hacer. Es retarte a diario a hacer más de lo que haces. Lo podemos definir como ponerte la vara más alta cada día, exigirte un poco más.
Para muchos no es una tarea fácil. Salir de tu zona de confort al principio será duro, puede que sientas temor o que te produzca ansiedad. Pero no dejes de hacerlo porque el esfuerzo a la larga merecerá la pena.
Razones para salir de tu zona de confort
Resiliencia
Salir de esa zona de confort te permite adaptarte a las situaciones que no están en tus manos. Te hace más resistente a los cambios. Te permite resolver problemas más eficazmente.
Fortaleza
Te hace más fuerte para superar cualquier dificultad que se te presente en la vida. Muchas veces no tenemos idea de lo fuertes que podemos ser hasta que nos retamos. Nos damos cuenta que podemos lograr habilidades prácticas, emocionales y psicológicas.
Crecimiento
Salir de tu zona de confort te ayuda a madurar emocionalmente, a tomar conciencia del valor de las cosas, y a crecer como ser humano. También obtienes tolerancia a las frustraciones por no conseguir algo.
Poder
Te da el poder que te otorga el conocimiento. Mientras más conocimiento tenemos, más poder, en el sentido de que estás preparado para muchas más cosas que puedes hacer en la vida. Te enriquece porque te puede dar una visión diferente de las cosas.
Creatividad
Al tener que solventar momentos complicados, te vuelves creativo para lograrlo. Activas tu imaginación y vas a sentirte revitalizado. Todo esto reduce tu estrés, aumenta tu autoestima y te da una vida más plena.
En Estilo de vida y Bienestar tenemos mucho contenido para ti y toda tu familia, te esperamos.
Cosas que te ayudarán a salir de tu zona de confort
Ponte una lista de retos diarios
Tienen que ser retos que puedas cumplir y te traigan beneficios. Por ejemplo, aprender a tocar la guitarra. Otra idea es inscribirte en clases para aprender otro idioma.
Busca conocer gente
Lo puedes lograr haciendo voluntariado en una iglesia, redescubriendo a tus compañeros de trabajo, invitándolos a una actividad fuera de la oficina, registrándote en una excursión organizada.
Hazte de una nueva rutina de oración
Si solo oras a primera hora de la mañana, exígete un tiempo más en el día; y cuando ya lleves más de tres semanas cumpliéndolo, elige otro tiempo de calidad con Dios.
Organiza actividades
Una salida al teatro o a practicar bolos es algo novedoso, divertido y donde te sales de tu rutina y por tanto, de tu zona de confort.
Rebate tus excusas
Anticípate a las excusas que sabes que siempre pones para no hacer algo nuevo. Cuando pienses en salirte de tu zona de confort, no te permitas poner trabas. ¡Puede resultar estimulante!
Recomendaciones y sugerencias finales
Te recomendamos que empieces por pequeños retos que vayas superando y así salgas de tu zona de confort poco a poco. Te irás acostumbrando y luego puedes ponerte retos mayores y superándolos. Te garantizamos un giro inesperado y agradable para tu vida.
Al salir de la rutina, de la monotonía, vas a sentir como renovadas ganas de vivir y descubrir todo lo nuevo que puedas conseguir. Tu vida se va a hacer más interesante y vas a lograr disfrutar de los cambios inesperados que se presenten porque tendrás una nueva perspectiva.
Quizá no se te haga fácil salir de esa zona de confort lo más pronto posible, pero si identificas lo que esa situación está causando en tu vida posiblemente sea mucho más fácil de lograrlo.