Muchas personas hoy día sienten que no merecen perdón y cuando han pecado mucho, no pueden creer que Dios los siga amando. Pero Dios te perdona todo, cuando vienes a Él rendido y arrepentido de corazón. Solo eso. Él necesita estar seguro de que te pesa lo que hiciste.
Para Dios no hay distinción o categorías de pecados. Sin embargo, sabemos que es un Dios justo. Es lógico que si el pecado es mayor, el arrepentimiento deba ser mayor y honesto, de corazón. Si has pecado mucho, ve a Dios y pídele perdón de corazón. Espera en Él y permite que dirija tu vida.
El único pecado que Dios no perdona es blasfemar contra el Espíritu. De resto, perdonará todo pecado y blasfemia. Nuestro Dios demostró cuánto amor siente por nosotros, cuando envió a Su Hijo único, Jesús, a ser la paga por nuestras faltas, para que quienes creamos en Él tengamos vida eterna a Su lado.
Por eso les digo, cualquier pecado y blasfemia pueden ser perdonados, excepto la blasfemia contra el Espíritu Santo, que jamás será perdonada.
Mateo 12:31 (NTV)
Dios te perdona aun si has pecado mucho
Dios te ama de una manera sin igual. Te perdona siempre que te arrepientas y vengas a Él. Ten en cuenta todas las veces que David falló, pese a ser reconocido como un hombre de Dios. Llegó a cometer adulterio e incluso propiciar la muerte del esposo de la mujer con la que pecó.
Sin embargo, totalmente arrepentido, buscó de Dios con honestidad y de corazón. Y Dios lo perdonó. Sintió gran dolor, pidió compasión a Dios y le pidió que interviniera en su vida. Salmos 51 expresa todo ese dolor y arrepentimiento de David luego de todo lo que hizo.
No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo. Restaura en mí la alegría de tu salvación y haz que esté dispuesto a obedecerte. Entonces enseñaré a los rebeldes tus caminos, y ellos se volverán a ti.Perdóname por derramar sangre, oh Dios que salva; entonces con alegría cantaré de tu perdón.
Salmos 51:11-14 (NTV)
Debes saber que aun el pecado perdonado tiene consecuencias. Cuando lees la historia de David, ves que fue castigado, y ese castigo era necesario en primera instancia para defender la reputación de Dios. En segundo lugar, para que David viviera las consecuencias de su error y no le quedaran deseos de volver a pecar.
Sin embargo, como has mostrado un total desprecio por la palabra del Señor con lo que hiciste, tu hijo morirá.
2 Samuel 12:14 (NTV)
Fueron muchas las consecuencias que David tuvo que vivir debido a que pecó mucho pese a que seguía amando a Dios. Sin embargo, por su honesto y sincero arrepentimiento; aunque Dios no lo eximió, sí lo perdonó con gracia luego de pagar el precio. Y en vista de la caída de David, nos vimos necesitados de un rey digno.
Jesús vino de la rama de David, pero fue el líder perfecto que nunca falló cuando fue probado. No tuvo pecado que esconder. Nunca abusó de Su poder. Nosotros nunca alcanzaremos el estándar que Dios desea de nosotros y por eso, necesitamos pedir a Jesús que sea nuestro Señor y Salvador. Te invitamos a no dejar de luchar por ser mejor cada día.
Al tomar esa decisión, tendrás a Jesús como tu abogado el día del juicio, que se presenta delante de ti. Y es la manera como Dios lo ve a Él y no verá tus muchos pecados pasados. Jesús te limpia de pecado. Si lo escoges, Su Espíritu Santo habita en ti y te ayuda a vencer las tentaciones.
Cuando peques, puedes estar seguro de que Dios te perdonará; pero no podrás evitar las consecuencias que te traiga lo que hiciste. Por tanto, la conclusión debe ser, que tienes que permanecer respetando las leyes de Dios y que no vale la pena pecar.