Serán muchas las batallas que tendrás que enfrentar en la vida. Dios no nos prometió que al creer en Él se acabarían las luchas. De hecho, mientras más nos acercamos a Dios, puede que el enemigo se esfuerce más en distraernos o abatirnos.
Pero no olvides nunca que si estás del lado de Dios, Él es tu respaldo, es tu protección y tienes con eso, la fuerza del Todopoderoso. El Creador de todo, el que venció la muerte, Él es más fuerte que cualquier batalla que tengas que enfrentar en este mundo. Por tanto, siente que las batallas están ganadas.
¿Y quién puede ganar esta batalla contra el mundo? Únicamente los que creen que Jesús es el Hijo de Dios.
1 Juan 5:5 (NTV)
Eres vencedor porque tienes al Dios que mueve montañas, que creó todo, el sol, las estrellas y el Universo con solo hablar. Ese Dios, aunque te parezca difícil de creer, te ama como nadie te ha amado ni te amará. Es tu creador y te conoce desde antes de nacer.
Te conocía aun antes de haberte formado en el vientre de tu madre; antes de que nacieras, te aparté y te nombré mi profeta a las naciones.
Jeremías 1:5 (NTV)
Si lo buscas, vuelves tu corazón a Él te ayudará a ganar tus batallas
Dios promete luchar por nosotros cuando volvemos nuestro corazón a Él y buscamos Su voz. Rendirnos totalmente a Él lo trae por Su inmensa misericordia, a atender nuestro llamado. Por tanto, vuelve tu corazón a Dios, busca Su voz y ríndete totalmente a Él. Dale las riendas de tu vida.
Siempre tendemos a querer tener el control en nuestra vida, queremos manejar todo de acuerdo con nuestro punto de vista, nuestra perspectiva. Pero hoy te digo que hagas lo mejor que puedas de tu parte, pero si no se te dan las cosas, recuerda entregar las riendas a Dios.
Comprobarás, que cuando dejas de luchar y mirar los problemas y te enfocas en Dios y pones esos problemas en Sus manos, Él actuará y saldrás vencedor. Considera tus batallas ganadas al acudir a Dios y entender que Él está contigo y te ama.
Oración del día
Mi Dios bendito y amado, gracias por ese amor que me tienes, gracias por esa misericordia divina que hace que me perdones tantas faltas. Estoy eternamente agradecido por Tu gracia y Tu protección.
Mi Señor, ayúdame a confiar totalmente en que contigo soy vencedor de cualquier batalla que la vida me presente. Que pueda yo enfocarme en tu gran amor y en el incomparable poder que tienes, en el nombre de Jesús lo pido y digo amén y amén.
Aplicación
¿Qué problemas estás pasando en este momento en tu vida?