A quienes nos gustan las plantas, y en general la naturaleza, podemos decir que nuestra vida puede ser como un jardín. Requiere cuidados, atención, dedicación y amor. También las relaciones son así. Hay que dedicarles tiempo, amor y cuidados.
Cuando Dios creó a los seres humanos, los colocó en un jardín, el jardín del Edén y los puso allí para hacerse cargo, cuidarlo. Y su vida comenzó en ese jardín. Un maravilloso jardín donde había un solo árbol que estaba prohibido. Y parece insólito, que de todas las maravillas y provisiones que tenían, no se pudieron mantener alejados del árbol que no debían tocar.
Los seres humanos tenemos esa tendencia terrible de desear lo prohibido. Para que nuestra vida sea realmente como un jardín, tenemos que amar primeramente la vida, tenemos que amarnos nosotros y comprometernos a cuidar de nosotros y de nuestro entorno, incluidas las personas que están en él. Cuidarnos significa también, mantenernos alejados de las tentaciones.
Porque la Biblia no sólo se refiere al jardín como un lugar apacible. También reflejaron los profetas la inmoralidad de pueblos, con imágenes de cosechas arruinadas, árboles podridos y tierras áridas. Y los pueblos que están con Dios como prósperos con jardines llenos de frutos y rozagantes.
Jacob se arraigará, Israel florecerá y cubrirá toda la tierra de fruto.
Isaías 27:6
Nuestra vida como un jardín
El jardín entonces puede hablar del corazón humano, que bien regado, cuidado con amor y con dedicación puede dar fruto en nuestras vidas, mejorar la apariencia de nuestro entorno, llenarnos de satisfacción y saciar nuestras necesidades. Es magnífico buscar hacer la vida como un jardín para nosotros y para quienes viven con nosotros, interactúan con nosotros e incluso para quienes nos toque a nosotros cuidar.
El ingrediente clave
Tal vez requiere de nuestro tiempo, pero todo lo que se hace con amor, necesita de ese ingrediente. Poniendo un poco de abono de paciencia, de vitaminas de cariño y agua de sabiduría del cielo, nuestra vida puede ser como un magnífico perfumado y esplendoroso jardín.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.