Nada deteriora más la confianza en uno mismo y en los demás que dar tu palabra y no cumplirla; por eso, hoy te traemos cuatro estrategias para que tu palabra sea suficiente. Te ayudarán a obtener el respeto y la confianza de todos en tu entorno.
1. Antes de dar tu palabra, analiza lo que abarca
Cuando firmamos un contrato, nos gusta leerlo todo para saber a qué nos estamos comprometiendo. En el caso de dar tu palabra, debe ser igual; y analizar lo que estás prometiendo o aquello con lo que te estás comprometiendo te hará saber si realmente vas a cumplir y sea suficiente el dar tu palabra.
2. Cumple contigo mismo para acostumbrarte a cumplir con los demás
Una persona que cumple consigo misma, lleva a cabo las tareas que se propone hacer cada día, lucha por cumplir sus sueños y logra las metas que se ha trazado, más fácilmente logrará que su palabra sea una transacción más que suficiente. No engañarte a ti mismo con excusas para no cumplir lo que debes hacer, lo que debes realizar y te has propuesto lograr, es esencial.
3. Ten presente que dar tu palabra y cumplirla es una cuestión moral
Tener la ética esencial de no hacer trampas ni a nosotros ni a otros denota fuerza moral. Porque cumplir con tu palabra te libera de cargas de culpa. Refuerza tu autoestima y te hace sentir digno de respeto, valor y merecimiento. Podrás cultivar el valor de ella con honradez, firmeza, dedicación y transparencia en todo lo que hagas.
4. Elimina del todo omisiones y mentiras piadosas
Muchos sienten que omitir algo no es mentir y que hay mentiras piadosas. Es bueno eliminar también las exageraciones. Son muchos los casos en los que esos hechos pueden justificarse. Sin embargo, eliminándolos o evitándolos al máximo, te hará ganar la confianza de todos y será más factible que logres que tu palabra sea suficiente.
Esperamos que pongas en práctica esas cuatro estrategias porque cuanto más valor tenga tu palabra, más respeto obtendrás de todos en tu entorno y más fortalecida sentirás tu autoestima. La confianza es algo que no tiene precio. Nada es comparable a los beneficios de ser una persona que no tenga que firmar para que le crean.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.