Cuando estuvo en la Tierra, Jesús demostró amor de varias maneras; y cada una de sus acciones nos enseña que nosotros también podemos mostrar amor a otros, incluso cuando ellos nos hacen daño.
Jesús demostró amor cuando…
Sanó a los enfermos
Hay muchas historias que registran los milagros de Jesús, y estas acciones son más que hechos supernaturales: son formas con las que Él demostró amor.
Jesús no solo sanó enfermedades físicas, sino que a través de estos actos restauró familias, ayudó a otros a crecer en su fe. Asimismo, Jesús sanó las heridas espirituales y restauró a las personas que habían sido rechazadas.
Al sanar, Él ofreció a las personas un nuevo comienzo que solo puede ser el fruto del amor.
Escuchó y prestó atención
Una práctica común de Jesús era sentarse y conversar con las personas; tanto así que recibió críticas por frecuentar con gente rechazada por la sociedad (Marcos 2:16). Pero Él no juzgó a las personas por su reputación o condición, sino que les dio de su tiempo para hablar con ellos.
Una de las historias más famosas es la de un grupo de judíos que llevaron a una mujer ante Jesús para que la juzgara (Juan 7:53-8:11). Ella había cometido adulterio y todos esperaban que Él la condene y desprecie; sin embargo, Jesús habló con ella, la perdonó y la dejó ir.
El simple hecho de dirigirle la palabra y escucharla ya era un acto de amor, porque nadie más le había dado el espacio para expresarse. Aquel día, la mujer no solo salvó su vida, sino que también experimentó de primera mano el amor de Jesús.
Compartió alimentos
Al compartir y proveer alimentos, Jesús mostró que prestaba especial atención por las necesidades de la gente. Para Él hubiese sido sencillo enfocarse en difundir su mensaje e ignorar las necesidades físicas de su audiencia; no obstante, Él proveyó y se ocupó de atenderlos.
Este acto de Cristo nos demuestra que los gestos de amabilidad que a menudo parecen simples, pueden decir mucho de nuestro amor por otros.
Compartió las buenas nuevas
La misión del Hijo de Dios era clara: salvar a la humanidad del pecado; y Jesús demostró amor al cumplir con Su propósito y al compartir las buenas nuevas de salvación.
Gracias a las enseñanzas de Jesús es que hoy podemos conocer la verdad y ser salvos; de lo contrario, seguiríamos viviendo en l oscuridad y sin esperanza de vivir.
Intercedió ante el Padre
Jesús ocupó nuestro lugar y murió para darnos salvación; pero también intercedió por nosotros ante el Padre (Juan 17:15-23). En sus oraciones vemos que se preocupaba por el bienestar de las personas y no dejaba de rogar por ellos.
Por otra parte, la Biblia dice que Jesús sigue intercediendo por nosotros y actúa como nuestro abogado (1 Juan 2:1). Este hecho atestigua que Su amor es infinito y sigue vigente.
Perdonó
Durante su tiempo en la tierra, Jesús perdonó a muchas personas, aun cuando estas no lo pedían. Y cuando murió y resucitó, lo hizo para ofrecernos redención.
El perdón es una poderosa forma de mostrar amor, ya que solo el amor puede cubrir las faltas.
Dio su vida por nosotros
La mejor muestra de amor es que Jesús murió por nosotros (Juan 15:13-17). Él sabía todo el sufrimiento que tendría que pasar, pero soportó todo sin quejarse. Aunque tenía el poder y la autoridad para evitar el dolor, continuó su camino hasta la cruz.
Hay una frase que dice que lo que mantuvo a Jesús en la cruz no fueron los clavos, sino Su amor por nosotros. Por eso, una vez que aceptamos su sacrificio, ya no podemos vivir más según el pecado que esclaviza, sino con la libertad que tenemos en Cristo.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.