Enfoques de enseñanzas para la iglesia

Desde los inicios del cristianismo la iglesia se ha dedicado a fomentar el crecimiento de sus miembros en la fe. Una vez cimentados en la fe el siguiente paso es compartirla y así cumplir con la gran comisión. Y la iglesia lo hace capacitando desde dentro a sus miembros. Las capacitaciones y enfoques de enseñanzas varian según la iglesia, según sus necesidades y la temporada que esté viviendo. Sin embargo existen, varios principios fundamentales que se observan a lo largo de los diversos enfoques de enseñanzas y aquí te compartiremos algunos.

¿Cómo elegir el mejor tema de enseñanza para la iglesia?

Lo primero es pedir y buscar la dirección del Espíritu Santo. El Espíritu Santo es nuestro guía y dentro de sus muchas funciones sirve como consejero. Además, el Espíritu Santo nos revela la voluntad del Padre, según dice la Biblia:

Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.  Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.  Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.

Juan 16:13-15 (RVR 1960)

Al orar y buscar la dirección del Espíritu Santo, recibimos revelación y discernimiento sobre las enseñanzas que son apropiadas para la iglesia durante la temporada especifica en la que se encuentra.

Lo segundo al buscar el mejor tema para de enseñanza para la iglesia es basarse en la Biblia: La Biblia es la fuente principal de enseñanzas para la iglesia. Es importante estudiar y comprender las Escrituras para obtener una base sólida en la enseñanza de la Palabra de Dios. Los libros y sermones de otras personas reconocidas y respetadas pueden aportar valor, pero no deben sustituir el tiempo a solas con la Palabra de Dios.

Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí.

Juan 5:39 (RVR 1960)

Para escoger bien los temas de enseñanza de la iglesia es necesario pasar tiempo leyendo las Escrituras.

El pastor Andres Spyker lo expresa de la siguiente manera en su libro Predicación al siguiente nivel:

Todo el que estudia la Biblia y la enseña sabe que la Biblia es una fuente inagotable de sabiduría y conocimiento; puedes leerla mil veces y ver algo distinto cada vez, un ángulo fresco, un matiz que no habías percibido antes.

Andres Spyker (pág. 46).

La riqueza de la Palabra de Dios es clave al escoger los temas a tratar en la congregación.

Cómo saber si las predicas son las que necesita la congregación

Finalmente, después de buscar la guía del Espíritu Santo y escudriñar las Escrituras, considera las necesidades de la congregación: es importante tener en cuenta las necesidades y circunstancias específicas. Las enseñanzas deben ser relevantes y aplicables a la vida de los miembros de la iglesia; deben brindar orientación y apoyo en sus desafíos y situaciones cotidianas.

Ser sensibles a las necesidades y circunstancias relevantes de tu audiencia, o incluso de la comunidad en general, es también parte importante de responder a la dirección de Dios para proclamar su Palabra a otros.

Andres Spyker (pág. 52)

Es importante recordar que el mismo Jesús se detuvo varias veces en su caminar para compartir lecciones, palabras de vida que contestaban una necesidad especifica de su audiencia. La mujer con el flujo de sangre recibió sanidad, la mujer del perfume en el frasco de alabastro recibió perdón y reconocimiento. Zaqueo recibió una visita en su casa que transformó su vida y la de su familia. En todas estas ocasiones Jesús se dirigía a un lugar y tenía una agenda trazada. Sin embargo, las necesidades de la gente le movieron a detenerse y saciar primero la sed de aquellos que lo anhelaban.

La enseñanza más acertada es aquella que refleja tanto el corazón de Jesús y Su amor por la gente.