Un consejo útil para quienes quieren ser artistas de música cristiana
En su trabajo en Heaven Music, Lian es responsable de encontrar nuevos artistas prometedores para que los firme el sello discográfico; y ya que su trabajo le ha permitido encontrarse con diferentes tipos de personas, él afirma lo siguiente:
Es fácil mirar a alguien y decir: «Yo quiero ser como él. Yo voy a llegar a ser como él. Esa es la vida que quiero. Ese es el lugar donde quiero estar».
El consejo que yo le daría a los que están empezando en esto es que no se comparen, que con los únicos que puedan competir sea con ellos mismos y decir: «Este año he sido mejor artista que el año pasado», «este año he crecido en esto», «este año he podido adquirir nuevas posibilidades», «este año he podido invertir más en mi música, en mi productor, he podido hacer cosas de mejor calidad».
Debes tener constancia y estar enfocado en que lo que estás haciendo porque es algo que Dios te ha pedido y tienes un llamado genuino para tu vida. La constancia y tener esta certeza de que Dios te ha llamado, van a hacer que puedas crecer.
A esto se le suma la originalidad, pues es será el elemento diferenciador que destacará al artista. Un imitador solo puede llegar hasta cierto punto; pero un artista que aporta algo nuevo a la industria y está en constante renovación es quien triunfará y llegará más lejos.
¿Necesitas un sello discográfico para comenzar tu carrera?
Contrario a lo que muchos creen, un sello discográfico no es la mejor solución si quieres convertirte en un artista de música cristiana. Cuando un artista que recién está comenzando le pregunta a Lian si es conveniente firmar con una disquera, su respuesta es que no.
Hoy no es necesario firmar con un sello; al menos en el proceso de artista emergente, yo aconsejo que ellos puedan hacer su carrera como independientes.
Seguí sembrando, seguí creciendo y va a llegar un momento en el que vos no vas a estar buscando un sello: los sellos te van a buscar a vos, porque vas a tener una propuesta tan seria y tan escalable que hay tu proyección dirá «esta persona no ha tomado la música como un hobby ni se levantó un buen día y dijo que a partir de ese día quería cantar».
La primera etapa de trabajo de un artista no solo sirve para darse a conocer al mundo, sino también para demostrar cuán serio se toma su carrera musical. Al igual que en cualquier otra profesión, para triunfar hace falta dedicación; y un músico debe probar que seguirá perseverante hasta el final.
Entonces, ¿para qué sirven los sellos discográficos?
Cito a alguien muy querido para nosotros y para la industria musical; una vez charlando, él me contó su manera de ver esto. Emanuel Espinoza me dijo:
«El sello solo es un facilitador de herramientas. Es como construir una pared: el sello te puede traer la pala, las herramientas de trabajo, el cemento, la arena; pero el que tiene que levantar esa pared es el artista, es la banda. Cuando te traen todas esas herramientas, tu trabajo es más rápido, más efectivo, no tenés que hacer tanta fuerza para levantar esa pared vos solo, sino que ya tenés ayuda con todas esas herramientas.»
Me parece una imagen muy linda de lo que es esa alianza sana entre un artista y un sello.
La industria musical es un ministerio, pero también es un negocio
Un médico que invierte más de 10 años en su educación y pasa horas especializándose merece el pago correspondiente a su trabajo. De igual manera, un artista invierte en su carrera y necesita obtener ganancias porque a eso se dedica.
A veces nos cuesta entender porque creemos que un artista está solo en su esfuerzo; no obstante, todo músico o cantante tiene a un equipo que le respalda. Los gastos que genera la música son altos y debe haber un ingreso para cubrirlos. Un artista que no entiende que así funciona la industria musical no tiene una visión completa de lo que se enfrenta.
Un artista cristiano serio que quiera dedicarse a esto, necesita verlo como un negocio. Lo que pasa es que esa palabra, en el contexto cristiano, puede sonar muy chocante.
Quizá haya alguien que lea esto y se rasgue las vestiduras; pero para mí, no deja de ser lo mismo que una familia cristiana que tiene una panadería, que tiene un negocio de venta de comida. Esto es algo es algo en que el artista necesita invertir dinero, tiempo y esfuerzo; y si se dedica, tal cual como alguien se dedica en una carrera, necesita encontrar un modelo de negocio que le dé un retorno de inversión.
El hecho de que la música sea un negocio no hace que sea menos espiritual. Como cristianos entendemos que si no está en los planes de Dios, nada de lo que hagamos tendrá éxito porque no es Su voluntad para nuestras vidas.
Todo esto está sujeto a la voluntad de Dios; y nosotros creemos que Dios nos guía, nos acompaña y Su favor nos ayuda a seguir avanzando; pero creo que no hay que sacar esa pata que sostiene el hecho de que un artista necesita vivir de esto.
Como los artistas están frente a un público y tienen un rango de influencia, los sellos discográficos serios se toman el trabajo de que el músico sea consistente con el mensaje que predica.
No vemos a los artistas como un producto. Nosotros tenemos una política de trabajar con gente que esté viviendo el mensaje que transmita, que sea algo real en su vida; y a través de sus dones y sus talentos que Dios le ha dado, pueda establecer una carrera donde empieza a ser de bendición para otras personas y también puede sustentarse a través de ella.
Una carrera musical demanda inversión
Hay historias de músicos que fueron descubiertos por algún productor y así obtuvieron su fama; pero esos casos son la excepción y no la regla. Aquellos artistas que han llegado a la posición donde están ahora es porque han invertido en primer lugar. Y hay algunos que pasan años y no ven el fruto de su esfuerzo.
Ante estos casos, Lian responde:
Creo que como todas las cosas, si fuera fácil, todo el mundo llegaría. Si no es algo que merezca sacrificio, todo el mundo estaría allí.
Mi consejo con esto es: no puede ser un hobby, no puede ser para probar suerte o para ver cómo va; tiene que ser algo que lo encares con un estado de concentración, de enfoque, en que no solamente puedas hacer música, sino que puedas hacerlo profesionalmente; y capacitarse: esfuerzo, constancia.
Uno mira mucho lo que sucede en los videos; pero detrás de eso hay muchísimo esfuerzo y horas de trabajo; así que, ánimo, a seguir trabajando, a no bajar los brazos y, sobre todas las cosas, a constantemente entender y pedirle a Dios que confirme que eso es lo que tienes que emprender en tu vida.